Aquí os dejo con el primer cuento, "modernizado" por Fanny y Camille, alumnas de Troisiéme.
¿Alguna vez habías oído hablar de una Cenicienta que utiliza Facebook y Twitter? Pues aquí está:
Hubo una vez, hace mucho, mucho tiempo una joven muy bella, tan
bella que no hay palabras para describirla. Se llamaba Cenicienta. Cenicienta
era pobre, no tenía padres y vivía con su madrastra, una mujer viuda muy
cascarrabias que siempre estaba enfadada y dando órdenes a gritos a todo el
mundo.
Con la madrastra también vivían sus dos hijas, que eran muy feas
e insoportables. Cenicienta era la que hacía los trabajos más duros de la casa,
como por ejemplo:
-limpiar el váter porque sus hermanastras hacían muchas fiestas
y los invitados vomitaban
-reparar los coches de la familia, etc.
Un buen día, sucedió algo inesperado: el Rey de aquel lugar hizo saber a todos los habitantes de la región que invitaban a todas las chicas jóvenes a un gran baile en una discoteca privada que se celebraba en el palacio real.
El motivo del baile era encontrar una esposa para el hijo del
rey; ¡el príncipe! para casarse con él y convertirla en princesa. La noticia
llegó a la Cenicienta por Facebook y se puso muy contenta. Por unos instantes,
soñó con que sería ella, la futura mujer del príncipe, ¡la princesa!
Pero, por desgracia, las cosas no serían tan fáciles para
nuestra amiga Cenicienta...
La madrastra de Cenicienta le dijo en un tono malvado y cruel: -
Tú Cenicienta, no irás a la discoteca del príncipe porque te quedarás aquí en
casa fregando el suelo, limpiando el váter y preparando las lasañas de caballo
para cuando nosotras volvamos.
Cenicienta esa noche lloró en su habitación, estaba muy triste
porque ella quería ir a la discoteca y conocer al príncipe. Para consolarse,
ella escuchó a David Guetta.
Al cabo de unos días llegó la esperada fecha: el día de la
fiesta.
Cenicienta veía cómo sus hermanastras se arreglaban y se
intentaban poner guapas y bonitas, pero era imposible, porque eran muy feas de
tan malas que eran...pero sus vestidos...¡eran muy bonitos!
Al llegar la noche, su madrastra y hermanastras partieron hacia
la discoteca real, y Cenicienta, sola en casa, una vez más se puso a llorar de
tristeza.
Entre llanto y llanto, escribió en Twitter: - “¿Por qué seré tan
desgraciada? Por favor, si hay algún ser mágico que pueda ayudarme”, decía Cenicienta
con desesperación.
De pronto, sucedió algo increíble; se le apareció un hada Madrina muy buena y muy poderosa.
Y con voz suave, tierna y muy agradable le dijo a Cenicienta; - “No
llores más, te ayudaré”.
- “¿De verdad?” dijo Cenicienta un poco incrédula... “pero cómo
vas a ayudarme? No tengo un vestido bonito para ir al baile y mis zapatos
están todos rotos!”
La hada madrina sacó su varita mágica y con ella tocó suavemente
a Cenicienta, y al momento...oh!, qué milagro! un maravilloso vestido Dior
apareció en el cuerpo de Cenicienta, así como también unos preciosos zapatos de
Chanel.
Ahora ya puedes ir a la fiesta de palacio Cenicienta, pero...ten
en cuenta una cosa muy importante: tu vestido a las doce de la noche volverá a
ser las ropas de deporte que llevas ahora.
Hay algo más que debes saber, delante de la casa te espera una
limusina que te llevará a la gran discoteca en palacio, pero a las doce de la noche,
se transformará en un AX! Bien, dijo Cenicienta, ya soy feliz, solo por poder
ir a la fiesta.
Cuando Cenicienta llegó al palacio, causó mucha impresión a
todos los asistentes, nadie nunca había visto tanta belleza, Cenicienta estaba
preciosa!
El príncipe no tardó en darse cuenta de la presencia de esa
joven tan bonita. Se dirigió hacia ella y le preguntó si quería hacer un Harlem
shake.
Cenicienta dijo: “Sí, claro que sí!” Y estuvieron haciendo el
Harlem shake durante horas y horas...
Las hermanastras de Cenicienta no la reconocieron, debido a que
ella siempre iba sucia y llena de ceniza, incluso se preguntaban quién sería
aquella chica tan preciosa.
Pero de repente...”oh!, dijo Cenicienta, son casi las 12 de la
noche, mi vestido está a punto de convertirse en ropa de deporte, y la limusina
se transformará en una AX!”
- “¡Oh, Dios mío! ¡Tengo que irme!” le dijo al príncipe que
estaba sobre la mesa y hacía el Harlem shake.
Salió a toda prisa del salón de baile, bajó la escalinata hacia
la salida de palacio perdiendo en su huida un zapato de Chanel que el príncipe encontró
y recogió.
A partir de ese momento, el príncipe ya sabía quién iba a ser la
futura princesa... la joven que había perdido el zapato!,
-“Pero..caramba!” exclamó el príncipe, pero si no sé ni cómo se
llama, y mucho menos dónde vive!”
Para encontrar a la bella joven, el príncipe ideó un plan: buscar
en Facebook y hacer un página web que se llamaba: “¿De quién es este zapato?”
Envió a sus sirvientes a recorrer todo el reino. Todas las
jóvenes, chicas y mujeres intentaban probarse el zapato de Chanel, pero no
había ni una a que pudiera calzarse el zapato.
Al cabo de unas semanas, los sirvientes de palacio llegaron a
casa de Cenicienta. La madrastra llamó a sus feas hijas para que se probaran el
zapato, pero evidentemente no pudieron calzar el zapato.
Uno de los sirvientes del príncipe vio a Cenicienta en un rincón
de la casa, y exclamó: -“eh!, tú también, tienes que probarte el zapato!”
La madrastra y sus hijas dijeron: -“¡por favor!, cómo quiere
usted que Cenicienta sea la chica que busca el príncipe? Ella es pobre, siempre
está sucia y no fue a la fiesta en la discoteca del palacio!
Pero cuando cenicienta se puso el zapato y le encajó a la
perfección, todos se quedaron de piedra!, -“Oooh!, es ella! la futura princesa!”
Inmediatamente la llevaron a palacio y a los pocos días se casó
con el príncipe, por lo que fue una princesa. Nunca más volvió con su madrastra, vive feliz en palacio hasta
el último de sus días y tuvieron muchos hijos!
Muy simpático. Tienen mucha imaginación :)
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